Cuando los españoles llegaron a la costa de lo que iban a llamar la Nueva España - lo cual incluye el México actual - los zapotecas ya escribián desde hace más de 2000 años. Entonces, no es soprprendente que rápidamente adoptaron la escritura alfabética. Ésta escritura fue introducida como parte de un compromiso expansivo que tenía como objetivo la conversión de la población indígena al cristianismo. Tal proyecto creó la necesidad de un proceso de aprendizaje sin precedente en la historia del mundo: describir y analizar las múltiples lenguas de Mesoamérica. Los resultados de este proyecto fueron numerosos diccionarios, gramáticas y obras religiosas creados por frailes dominicanos que dependieron de gran manera de la colaboración con hablantes del zapoteco.
Estas comunidades indígenas comenzaron a utilizar el alfabeto castellano para escribir y crear documentos en su propio idioma para su propios propósitos, incluyendo testamentos, títulos, y cantos. Investigadores han identificado documentos coloniales escritos en el zapoteco Central, zapoteco Cajonos, zapoteco Nexitzo, y zapoteco de la Sierra Juarez. Hoy estos textos estan dispersos en archivos y repositorios municipales, estatales, nacionales e internacionales. Actualmente, Ticha provee acceso a documentos coloniales escritos en zapoteco central (del valle), como el Arte, un libro que intenta describir la estructura de la lengua zapoteca, y varios testamentos.
Los documentos en lenguas indígenas son fuentes invaluables para entender los desarrollos históricos y culturales de los pueblos mesoamericanos desde el inicio del periodo colonial al día de hoy. Contrario a textos españoles, estos documentos en lenguas vernáculas describen el mundo usando sus propias categorías culturales.Por ejemplo, en testamentos zapotecos el testador ofrece su alma a Dios para que la coma y su cuerpo para que lo consuma la tierra; claras continuidades de percepciones indígenas relacionadas con la muerte. Estos textos, y como tal el portal Ticha, son una ventana para que las comunidades indígenas contemporáneas e investigadores exploren la historia, lengua y cultura zapoteca.
Vea Dizhsa Nabani, una serie web documental, para aprender más sobre la relación entre la identidad, la lengua y la vida cotidiana en la communidad zapoteca del valle de San Jerónimo Tlacochahuaya.
El zapoteco es una familia extensa de lenguas propia del sur de México, que forma parte de la más amplia familia del otomangue. Actualmente, existen más de cincuenta idiomas zapotecas (código iso zap), la mayoría de ellas en peligro de desaparición. Como parte del pueblo zapoteco hay aproximadamente 425,000 personas (INEGI 2010) que hablan el zapoteco, principalmente en el estado de Oaxaca, México. Debido a la migración, actualmente existen zapoteco-hablantes en varias regiones de México y los Estados Unidos. La variedad dialéctica entre los pueblos zapoteco-hablantes es extensiva y complicada. Muchas variantes del zapoteco no son intelígible mutuamente. En términos de profundidad temporal y diversidad lingüística, la familia de lenguas zapotecas está en par con la familia de lenguas romances.
La variedad del zapoteco presentada en Ticha representa el zapoteco del periodo colonial (1521 a 1821). Durante este periodo, se escribieron cientos de documentos en zapoteco, lo que incluye materiales religiosos, testamentos, memorias y cartas. Muchos de estos documentos, como los textos administrativos locales, fueron escritos por nativo hablantes para el uso de nativo hablantes. Otros textos fueron escritos para sacerdotes españoles y probablemente fueron creados a través de una colaboración entre hispanohablantes y nativo hablantes.
Los textos que están actualmente disponibles en Ticha están en el zapoteco de la rama central, a menudo llamado el zapoteco colonial del valle. La bibliografía Ticha contiene publicaciones sobre esta rama.